Mejillón. General

Descripción General

El mejillón Mytilus galloprovincialis es un molusco bivalvo de tonos azules fuertes que vive formando agregados en las rocas costeras, tanto en las más expuestas y batidas por el mar como las rocas situadas, en aguas más salobres, hacia el interior de la ría. Se adhieren a la roca mediante filamentos del biso que se encuentra en su pie. No suele vivir a más allá de 15 metros de profundidad, aunque fueron encontrados en restos de bateas a treinta y cinco metros.
El aspecto interno del mejillón suele ser anaranjado, más acusado en las hembras ya que los machos, en la época de reproducción, presentan una coloración más blanquecina.
Sus dimensiones para comercialización son entre 7 y 10 cm. Es un organismo filtrador que se alimenta del fitoplancton y zooplancton, e incluso de partículas orgánicas en descomposición, que se encuentra en el agua del mar, mediante la filtración de la misma a través de sus branquias. La capacidad de filtración de los mejillones es enorme, bombeando hasta 8 litros por hora.
Sus depredadores son la estrella de mar, un caracolillo perforador que a través del agujero que taladra absorbe su cuerpo, los peces con fuertes mandíbulas (sargos y ballestas) y las gaviotas que para comérselo lo dejan caer sobre las rocas haciendo que se rompa.
Se cultivan en bateas que en general, se trata de una estructura flotante que consta de proa, popa y los costados, siendo la proa la parte destinada al amarre. Posee un emparrillado, normalmente de madera, del que cuelgan las cuerdas, un sistema de flotación, un sistema de sujeción y un sistema de cultivo.
El mejillón es un animal de sexos separados y la fecundación es externa por la liberación de gametos al medio. Las larvas tienen vida pelágica durante unas semanas mientras completan su desarrollo, luego se fijan al sustrato mediante los filamentos del biso.
En Galicia este proceso tiene lugar todo el año, con dos picos importantes en primavera y en otoño, siendo el más importante el primero porque la fijación es mucho mayor. Una sola hembra es capaz de liberar entre 600.000 y un millón de huevos y tras el desove se queda muy enflaquecida.